7 de mayo de 2010

Mierda y la vaca al rescate como siempre

En un invierno frío y desapacible, un gorrión pasó dos noches a la intemperie con el único abrigo que proporcionaba la rama de un árbol.
Convencido de que no podría sobrevivir una tercera noche en esas
condiciones, abandonó el árbol en busca de un refugio mejor.
Mientras volaba sentía como se le congelaban las alas, hasta que
finalmente se le congelaron del todo y cayo al suelo. Cuando yacía congelándose,se dio cuenta que esa noche acabaría su vida.
Ya pidiendo en silencio por una muerte rápida, de repente, en su estado de semi-inconsciencia, sintió como era cubierto por un caliente abrigo.
Poco después recuperó la consciencia, y vio que una vaca había cagado generosamente sobre él.
El nuevo soplo de vida y el supremo confort que sintió le hicieron muy feliz, así que comenzó a cantar.
Un gato que pasaba por allí oyó los gorjeos, localizó la voz y cuidadosamente removió los excrementos para descubrir al pequeño
Gorrión,al cual rápidamente se comió.
Hay varias moralejas en esta historia:
1.- Nunca te consideres muerto, hasta estar realmente muerto.
2.- Si alguien te caga, no es necesariamente tu enemigo.
3.- Si alguien te saca de la mierda, no es necesariamente tu amigo.
4.- Si estas con la mierda al cuello, pero feliz, mantén la boca
cerrada.




Ah me hace acordar a mi día de ayer... si si..
siempre en lo que subo nombro a vacas, es una señal? :-/


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